jueves, 27 de octubre de 2011
Te odio.
Apoyada en la pared. Mirando tus ojos húmedos; rojos de tanto llorar. Por encima de la música demasiado poco alta se oye el tic-tac de un reloj. Estúpida más que estúpida. Duele joder, mucho. Eres fea, el rímel corrido te sienta mal. Putos moldes. Puta yo, soy imbécil. Y tengo la culpa de todo sin querer. Y me maldigo a mi misma, pero a tí también, por hacerme creer que todo lo que digo sobre mi es cierto, por hacerme creer que la única solución es encerrarse en el baño y llorar, llorar.
miércoles, 26 de octubre de 2011
¿Es mucho pedir?
No pido que me des un beso cada día; sólo que me dediques
una sonrisa de vez en cuando. No te pido palabras bonitas, alguna cara rara,
una palabra mal sonante, o incluso en los casos más extremos que me abraces por
accidente. No te pido que hables de mi cada día, ni que les cuentes a tus
amigos que tenemos algo. Sólo pido que de vez en cuando te acuerdes de mí,
aunque sea una vez en cuatro meses, cuando juega un Madrid-Barça.
No quiero pasarme el día colgada del teléfono hablando contigo,
escucharte al punto de la mañana con una palabra cargada de sueño es más que
suficiente. No quiero que pienses en mí
constantemente, sólo que recuerdes que alguien que te saca de quicio te ha
escrito algo en la mano, con un único fin, que te acuerdes de ella, aunque lo
niegue. No quiero ser alguien importante, sólo quiero ser alguien diferente
para ti.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)